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Propuestas de Aspirantes

UNIVERSIDAD NACIONAL DE COLOMBIA

SEDE MEDELLÍN

FACULTAD DE CIENCIAS AGRARIAS

Programa DECANATURA 2018 – 2020

“Por una Facultad Líder”

 

Héctor Jairo Correa Cardona

 

Soy graduado como Zootecnista de la Universidad Nacional de Colombia, sede Medellín, en 1992. Adelanté estudios de Maestría en Nutrición Animal en la Universidad Nacional Autónoma de México obteniendo un grado meritorio en 2000. Realicé estudios de Doctorado en Ciencias de la Salud y la Producción Animal en Universidad Nacional de Colombia, sede Bogotá, obteniendo el grado en 2011.

Ingresé a la Universidad Nacional, sede Medellín, como Instructor Asociado en 1998, asumiendo la asignatura Producción Bovina de leche. Desde entonces he sido profesor en otras tres asignaturas de pregrado y seis de posgrado.

Mi área de experticia es la nutrición y alimentación de rumiantes así como la evaluación de alimentos para rumiantes. Como aportes al fortalecimientos de esas área y a mi formación profesional, he escrito 47 artículos que han sido publicados en revistas indizadas y he presentado 72 ponencias en eventos de divulgación técnica y científica.

He tenido varios cargos académico-administrativos como son: coordinación del programa bovino de leche de la Estación Agraria Paysandú; representante profesoral ante el Concejo de Facultad; coordinador del Laboratorio de Nutrición Animal y del Laboratorio de Análisis Químico y Bromatológico; representante profesoral ante el Comité de Resolución de Conflictos; representante de la Facultad ante el Encuentro Nacional de Investigadores de Ciencias Pecuarias (ENICIP) y la Dirección del Departamento de Producción Animal.

 

INTRODUCCIÓN.

 

El comienzo de una nueva administración en la Universidad en cabeza de la profesora Dolly Montoya, abre las puertas para que se puedan llevar a cabo cambios significativos a nivel académico y administrativo en nuestra Institución. Son esperanzadoras las propuestas con las que la profesora Dolly fundamentó su candidatura a la Rectoría y por ello esperamos que sean materializados en una reforma académica profunda que dé cuenta del liderazgo que debe tener la UN dentro del Sistema Nacional de Educación, así como la recuperación de los valores y principios éticos y humanísticos en los currículos de los pregrados y la consolidación de una comunidad que se inserte en escenarios de educación, investigación y extensión para la paz.

La propuesta de trabajo académico y administrativo que les presento a continuación, va en consonancia con los ejes fundamentales de la administración que apenas comienza por parte de la profesora Dolly Montoya.

 

OBJETIVO DE LA PROPUESTA.

 

El objetivo de esta propuesta como candidato a la Decanatura de la Facultad de Ciencias Agrarias 2018 -2020, es la insertar a nuestra Facultad como líder de un Sistema Nacional de Educación Terciaria Agraria, en cumplimiento con los fines misionales de la Universidad.

 

PILAR DE LA PROPUESTA

 

Liderar el Sistema Nacional de Educación Terciaria (SNET) Pública es un objetivo al que la Universidad Nacional debería aspirar permanentemente muy por encima de su aspiración por figurar en los primeros puestos de las clasificaciones nacionales e internacionales de instituciones de educación superior. Liderar el SNET debería hacer parte de uno de los fines más importantes de nuestra institución: Contribuir a la unidad nacional.

Sin embargo, el actual SNET no pasa de ser un listado de instituciones clasificadas por su carácter académico (Instituciones Técnicas Profesionales, Instituciones Tecnológicas, Instituciones Universitarias o Escuelas Tecnológicas y Universidades) y por su naturaleza jurídica (Establecimientos públicos y Entes universitarios autónomos) que se hallan desarticuladas entre sí.  Los compromisos que se adquieren a través de convenios interinstitucionales o la conformación de grupos informales de trabajo, como el G8 de Medellín, están lejos de consolidar lo que debería ser un SNET para la región y el país. Las instituciones de educación superior en el país, incluida la Universidad Nacional, se basan en modelos académico-administrativos proteccionistas que restringen su participación con otras instituciones en el proceso de formación de estudiantes de pre- y posgrado, limitando, de esta manera la materialización de un SNET que en la práctica funcione como tal.

La realidad de la Educación Terciaria en Colombia es que hay un desconocimiento total de que “La educación es un proceso de formación secuencial, permanente, personal, cultural y social que se fundamenta en una concepción integral de la persona humana, de su dignidad, de sus derechos, y de sus deberes” (Ley 115 / 1994).

El  Ministerio de Educación Nacional concibe El Sistema Nacional de Educación Terciaria (SNET) como “una organización de los diferentes niveles de educación post-media, el cual comprende dos rutas o dos opciones educativas diferenciadas según su orientación académica u ocupacional, ordenadas, según grados de complejidad y especialización y, con posibilidades de tránsito y reconocimiento entre ellas”. La realidad es que las posibilidades de tránsito y reconocimiento entre ellas es mínimo y, en el caso de la Universidad Nacional, es nulo.

Materializar un SNET efectivo capaz de articularse en todos sus niveles, amplio, incluyente y democrático, basado en la cooperación y el apoyo integral y no en la competencia, es un proyecto de largo plazo que requiere en primer lugar reconocer las enormes fallas que generan las fracturas de la Educación Superior actual y el desarrollo de un plan de trabajo que sea liderado por la Universidad Nacional.

Al ser las Facultades el epicentro de la actividad académica de las Universidades, deben ser igualmente, el epicentro a partir del cual se teje y enlaza el SNET. Es por ello que nuestra Facultad debe comenzar a dar pasos que aporten a la concepción y materialización de un SNET Agrarias  (SNETA) capaz de reconocer que existen diferentes niveles de formación en aquellos ciudadanos que desean ingresar al Sistema, que el mecanismo de ingreso debe ser coherente con las diferencias en las fortalezas y limitaciones de los estudiantes que desean ingresar al Sistema, que es necesario explorar la posibilidad de otorgar un reconocimiento en los avances académicos parciales que logran los estudiantes, pero, sobre todo, ser capaz de reconocer que en un SNET consolidado y, en particular en un SNETA, los estudiantes no deberían pertenecer a una institución en particular, si no al Sistema como un todo, de la misma forma en que un pasajero que ingresa a un sistema integrado de transporte, no se queda en una única estación, sino que, que se beneficia de manera colectiva de varios sistemas de transporte, a través de diversas rutas hasta alcanzar su destino. Las instituciones que se conviertan en el destino de ese camino, serán las que otorguen los títulos profesionales como representante del Sistema.

Para avanzar en este objetivo es indispensable resolver asuntos de carácter académico y  administrativo que afectan el quehacer de la Facultad y la calidad académica de sus programas así como de los estudiantes.

  1. Asuntos académicos: se hace inaplazable la necesidad de revisar los efectos que sobre la calidad de los programas académicos tanto de pre- como de posgrado de la Facultad, generó la interpretación y aplicación del Acuerdo 033 de 2007. Esto necesariamente deberá conducir a la elaboración de una propuesta conjunta que nos permita plantear una reforma de dicho Acuerdo basada en lineamientos académicos que permitan apuntalar la Universidad en sus fines misionales, particularmente, en cuanto a su capacidad de liderar un SNET, por lo menos en lo que tiene que ver con el sector agrario del país.

Es muy importante evaluar aspectos específicos de este Acuerdo tales como la pertinencia y el impacto que realmente han generado los cursos nivelatorios de Matemáticas y Lecto-escritura sobre la calidad académica de los estudiantes. Existen muchas dudas sobre su efectividad y del alto costo en créditos académicos que ellos implican.

 

Los créditos académicos es una herramienta académica muy poderosa que desafortunadamente ha sido desconocida por muchos docentes, desdeñada por algunos y manipulada por otros. Pocos han sido los docentes que han entendido y utilizado racionalmente los créditos académicos de las asignaturas a su cargo. Es por ello que uno de las actividades más importantes desde el punto de vista académico  y que debe partir de la evaluación del Acuerdo 033 de 2007, es el análisis crítico y propositivo del significado y valor de esta herramienta y su papel en una eventual reforma académica.

Es necesario rescatar la posibilidad que da este Acuerdo de ofrecer programas de formación tecnológica (Artículo 9, Parágrafo 3) pero, así mismo, la necesidad de que dicha formación sea concebida como un nivel dentro de un proceso de formación por ciclos propedéuticos por su papel en el propósito de avanzar en la construcción de un SNETA. En ese sentido será importante revisar desde la Facultad, la pertinencia de hacer uso del Artículo 5 de la Ley 1188 de 2008. Esto contribuiría enormemente a la reducción en las pérdidas asociadas a la deserción estudiantil al evitar que el proceso culmine sin éxito cuando el estudiante deserta antes de culminar su carrera profesional, pero puede irse con un título que le certifica competencias como Tecnólogo(a).

Así mismo, se hace necesario insistir en la necesidad de modificar el sistema de ingreso a la Universidad para las carreras del sector agropecuario con la finalidad de incrementar el porcentaje de estudiantes que ingresan a carreras que son de su predilección. Se espera que, entre otras cosas, dicho ajuste en el sistema de ingreso repercutirá en el porcentaje de permanencia y de egreso como profesionales, al tiempo que se reducen las deserciones prematuras.

En la tarea permanente de fortalecer la infraestructura que requieren los programas académicos de alta calidad, se hace necesario avanzar en el mejoramiento de la infraestructura física de la facultad. Igualmente será necesario avanzar en la consolidación de la infraestructura y funcionamiento tanto de las Estaciones Agrarias y Forestal, como de los Laboratorios de la Facultad.

Resulta lamentable que la gran mayoría de nuestros egresados tanto de pre- como de posgrado, al culminar sus estudios se vean en la incertidumbre de conseguir trabajo. Muchos optan por las pasantías empresariales como una manera de ingresar al mundo laboral. Sin embargo, no son muchos los que logran vincularse a dicho mundo definitivamente a través de esa experiencia. Otra opción que no ha sido explorada formalmente en la Universidad, es la formación para la creación de empresas de base tecnológica como otra opción de Trabajo de Grado ya que con esta los estudiantes se estaría vinculando no solo al campo empresarial, si no, además, en las actividades de investigación que son necesarias para la innovación y el establecimiento de bases tecnológicas que soporte la creación de nuevas empresas. Esta opción esta soportada por normas internas de la Universidad y por la recién sancionada Ley 1838 de 2017 que establece la base normativa para la creación de empresas de base tecnológica (Spin Off´s) en las instituciones de educación superior del país.

Igualmente, será necesario revisar los programas de bienestar estudiantil que se encuentran en marcha en la Facultad y la Sede y que se hallan reglamentados mediante el Acuerdo 007 de 2010 del CSU, sobre sus efectos en la reducción de la deserción estudiantil. De acuerdo con esta Norma, el Sistema de Bienestar Universitario se constituye en un eje articulador de la vida académica de la Universidad y tiene como una de sus funciones, “contribución a la disminución de la deserción estudiantil…”. Esta, sin embargo, sigue siendo alta. Es por ello, que desde la decanatura de la Facultad, será necesario adelantar un análisis pormenorizado de las causas de esta deserción en el caso particular de nuestros estudiantes, desde el mismo momento en que ingresan a nuestros programas. Esto con la finalidad de cotejar dichas causas con las soluciones propuestas en el Acuerdo 007 de 2010 para hacer los ajustes necesarios que reduzcan esta problemática.

  1. Organización administrativa: será necesario madurar y poner a punto la Unidad de Gestión de Proyectos (UGP) de la Facultad así como la reorganización de la Unidad de Gestión Administrativa (UGA) con la finalidad de agilizar todos los procedimientos administrativos: compras y contrataciones. En ese sentido, será necesario revisar los procedimientos específicos tanto de las Estaciones Agrarias y Forestal así como de los Laboratorios que prestan servicios de extensión para que sean más ágiles y no afecten significativamente las actividades académicas, de investigación, extensión y producción, que allí se desarrollan. La creación y puesta en marcha de la UGP deberá impactar positivamente en la capacidad y agilidad en la gestión de la UGA, que fue, entre otras cosas, lo que justificó su creación. Esto implicará hacer una evaluación periódica de su gestión pero, así mismo, realizar un acompañamiento permanente de la UGP durante su primera etapa para adelantar todos los ajustes que requiera.

 

Este tipo de gestiones tienen como finalidad facilitar los procedimientos administrativos que mejoren la confianza de entes externos para adelantar contratos de extensión e investigación con nuestra Facultad, los cuales son fundamentales en el cumplimiento de los fines misionales de la Universidad.  En ese mismo sentido, será importante continuar con la tarea de optimizar los recursos que dispone la Facultad para cumplir los requerimientos asociados con todas las actividades que garantizan la calidad de los Planes Curriculares tanto de Pregrado como de Posgrado.

Para finalizar, será un compromiso personal el de liderar la participación de la Facultad en los Claustros y Colegiaturas que serán convocados por la próxima administración con la finalidad de que nuestras aspiraciones académicas y administrativas queden plasmadas en el Plan Global de Desarrollo de la Universidad. Para ello, será necesario revisar los Informes de Gestión y los Planes de Desarrollo propuestos por el actual Decano de la Facultad, profesor Jairo Alexander Osorio Saraz, con la finalidad de dar continuidad a aquellos programas y proyectos que contribuyan de manera efectiva al Liderazgo de Nuestra Facultad en la conformación de un SNETA. Así mismo, serán sustratos fundamentales y de alta prioridad, los informes que resulten de los Claustros y Colegiaturas en los que es nuestro deber participar.

 

Cordialmente,

Héctor Jairo Correa Cardona
Departamento de Producción Animal

Medellín, 16 de abril de 2018

PLANTEAMIENTOS SOBRE LA FACULTAD DE CIENCIAS AGRARIAS DE LA SEDE MEDELLÍN DE LA UNIVERSIDAD NACIONAL DE COLOMBIA

 

GUILLERMO VÁSQUEZ VELÁSQUEZ

 

PRESENTACIÓN

 

En mi calidad de ciudadano colombiano, docente en ejercicio en la categoría de Profesor Asociado en dedicación exclusiva, vinculado por algo más de 30 años a la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Colombia, Sede Medellín, presento en este documento ante la comunidad de profesores, estudiantes y egresados de los programas curriculares de la Facultad, y de manera posterior a los miembros del Consejo Superior Universitario, los siguientes planteamientos que constituyen el fundamento para postular mi nombre como aspirante al cargo de Decano de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Sede Medellín para el período institucional 2018-2020, conforme a la convocatoria que en cumplimiento de las normas que rigen para la Universidad hizo el señor Rector mediante Resolución 339 del 23 de marzo de 2018.

Me motiva hacer esta postulación 1) el conocimiento que tengo del sistema universitario colombiano, sus alcances y limitaciones, particularmente en relación con la formación del talento humano profesional y científico para atender las necesidades del agro colombiano; 2) el tener una vasta experiencia en el desarrollo de los fines misionales de la Universidad Nacional de Colombia, que abarcan en todo sentido a la Facultad, como quiera que además del ejercicio docente, he desarrollado múltiples actividades de investigación y de extensión, y he ocupado varios cargos de dirección académico – administrativa que incluyen la Dirección de Programa Curricular, la Dirección de Departamento y el de Secretario Académico de Facultad; y 3) la convicción de que desde la administración propositiva que se ejerza en la Decanatura es dable desatar y potenciar mayores actitudes académicas para el crecimiento y desarrollo de la Facultad de Ciencias Agrarias y de la comunidad académica que converge en ella.

Los planteamientos aquí contenidos están enmarados en cuatro aspectos: dos específicos, uno de carácter general y otro más que da soporte y compromiso para el desarrollo de los anteriores.

 

1. CALIDAD ACADÉMICA, DE LA RETÓRICA A LA EFECTIVIDAD

 

El concepto de “calidad académica” es usado de muy diversas maneras, algunas bastante vagas y difusas, otras en extremo irresponsables. En relación con ello, me parece acertada la acepción del sistema universitario alemán el cual considera que la “calidad” es el grado de éxito verificable en el propósito de formación planteado previamente a partir de una reflexión deliberada y conscientemente en el proceso de diseño curricular. Según esto, sólo se puede hablar de calidad si el profesional, especialista, magister o doctor que se gradúa reúne los estándares de formación que fueron formulados. La “calidad” no la da ni se deriva de la retórica común que suele presentarse en los plegables y páginas web de los programas de estudio, en los anuncios de prensa que difunde las convocatorias de la Universidad, en los reportes que se hacen sin mayor sustento en las jornadas de rendición de cuentas, ni tampoco, como es común aceptarlo, en los certificados de acreditación que periódicamente reciben los programas académicos.

La calidad académica surge de acciones concretas, validadas mediante indicadores, que es necesario proponer y desarrollar en los programas curriculares de la Facultad, particularmente en los de pregrado, debido a que desde la pasada reforma académica de hace cerca de 10 años no se ha adelantado un proceso serio y consistente de evaluación y ajuste. Por no haberlo hecho, desde hace años se han observado los muchos problemas relativos a la formación profesional, los niveles medios a bajos de cualificación de los egresados y su limitada competencia para incorporarse al mercado laboral. Creo que es irresponsable mantener la actitud de postergar la evaluación y ajuste de la reforma académica.

Entre varias acciones que se deben emprender con este propósito están:

  • Revisión de los programas curriculares: Para articular coherentemente las asignaturas en la malla curricular; detectar duplicaciones, vacíos y yuxtaposiciones; incorporar nuevas áreas de conocimiento y limitar otras que pueden haber perdido vigencia; revisar la distribución de créditos y examinar objetivamente los estándares de nivelación para los estudiantes de ingreso.
  • Estructura de la componente flexible: Revisión crítica y objetiva del peso porcentual que tiene en la actualidad el conjunto de materias flexibles (electivas, optativas, contextos), y evaluación de la necesidad de ajustar los créditos destinados a ellas para disponer de esos tiempos en asignaturas que fortalezcan la componente profesional.
  • Prácticas docentes intramurales: Con la reforma implementada, es ostensible la reducción de tiempos destinados al desarrollo de actividades intramurales en laboratorios, talleres, trabajo en herbarios, museos, etc. El espacio estrecho de las asignaturas y la limitada duración de los semestres lectivos ha relegado el desarrollo de éstas casi que exclusivamente a la clase magistral, lo que resulta muy indeseable, más tratándose de carreras de las ciencias naturales, del medio ambiente y del agro. Este aspecto merece un estudio detallado que eventualmente conduzca a la intensificación de tales actividades en el conjunto de las asignaturas.
  • Prácticas docentes extramurales: Permanentemente son el objeto de toda clase de críticas orientadas a su reducción o supresión, bien porque son costosas y también porque se ha verificado que algunas no tienen un desarrollo adecuado en lo estrictamente académico. No obstante, repensadas debidamente en su real esencia e importancia, es menester argumentar que las prácticas docentes extramurales, bien planificadas, con claros objetivos académicos, eficientes en el uso del tiempo, articuladas a empresas e instituciones, son una fortaleza indiscutible en la preparación de los profesionales y posgraduados de la Facultad. Por ello la Universidad y la Facultad no debe escatimar esfuerzos para buscar recursos de financiación, procurar espacios en las empresas, instituciones y comunidades para llevarlas a cabo, debe fomentarlas tanto como sea posible y debe también hacer de ellas un pivote para que la formación pase de ser casi que exclusivamente teórica a ser una formación que, sin descuidar la teoría, tenga una alta componente práctica que redunde en la apropiación de destrezas y habilidades profesionales para el futuro graduado.
  • Trabajo de grado: Hay que reconocer que antes de la reforma académica los trabajos de grado eran una talanquera para la culminación de los estudios y la graduación, puesto que se proponían y se exigían a los estudiantes trabajos que desbordaban las posibilidades de la formación de pregrado, ocupaban muchos semestres y frecuentemente conducían al fracaso y a la deserción. Sin embargo, la reforma académica llevó al otro extremo las exigencias y el alcance académico y formativo del trabajo de grado. Bajo las nuevas modalidades son muy bajos los niveles de lectura crítica y de escritura científica; la exposición pública de resultados en jornadas de discusión y debate quedó prácticamente abolida; la revisión por pares de los productos académicos como un primer ejercicio de confrontación para el próximo profesional, es ahora inexistente; y no se tiene ya esa interesante provocación a los estudiantes para que desarrollen trabajos acuciosos de suma responsabilidad y calidad. Es inexplicable que en la Facultad se haya perdido casi completamente este poderoso instrumento académico para potenciar la formación profesional de los egresados. Por ello, es necesario abrir un diálogo y una puesta en común que permita una revisión sensata del trabajo de grado como estrategia pedagógica, su ámbito y alcance.
  • Oportunidades académicas extra-curriculares: Es innegable que muchos egresados formados durante la vigencia de la reforma académica son exitosos, de grandes capacidades y competencias. Sin embrago, si se revisa con detenimiento esos casos, podrá evidenciarse que en su gran mayoría se trata de estudiantes que experimentaron al menos una, y frecuentemente varias, “oportunidades académicas”, término con el que denomino una variedad de situaciones no curriculares que se les ofrecen a los estudiantes para trabajar en un proyecto de investigación o de extensión, en un laboratorio, en un proyecto a cargo de los profesores, entre muchas cosas similares. Se trata de vivencias profesionales exigentes y serias, que aunque no representan nada en términos de créditos o de asignaturas cursadas, por su naturaleza son experiencias que nutren grandemente al futuro profesional. Quienes se gradúan habiendo tenido ya esta clase de oportunidades académicas, tienen un plus sobre los compañeros que por distintas circunstancias no accedieron a ellas.

Si se parte de reconocer la utilidad que en términos de formación tiene el desarrollo de labores no curriculares que acerquen al estudiante a su profesión, es indispensable reproducir tanto como se pueda las oportunidades académicas para brindarlas al mayor número de estudiantes que sea posible, haciendo que éstas no sean un privilegio de pocos, sino la oportunidad para la mayoría. Los profesores con sus proyectos de investigación y de extensión, con los laboratorios a su cargo y con la red de conexiones empresariales e institucionales, son la más importante fuente para lograr esta estrategia de formación.

COMPROMISO: En términos de la calidad académica, orientaré personalmente la revisión y materialización de las anteriores acciones, convocando para ello a los profesores, a los estudiantes y a los egresados. En esto dedicaré, por fuera de la oficina, el 40% del tiempo de que dispondría para ejercer la función de Decano de la Facultad, trabajando en los claustros, en los comités asesores, en reuniones con estudiantes y egresados, y en las empresas e instituciones del sector agrario que puedan contribuir con el desarrollo de la misión académica que le compete a la Facultad.

 

2. ADMINISTRACIÓN EFICIENTE (Y AMABLE)

 

De manera general, la administración del Estado colombiano es pesada y entrabada. Sus protocolos se derivan de instancias de orden nacional que aplican para todas las instituciones, los cuales deben atenderse rigurosamente. La propia Universidad es consciente de que el modelo administrativo actual limita su funcionamiento, retrasa los procesos y generan reacciones de malestar y rechazo entre profesores y empleados. No ha habido ninguna rectoría en los últimos 30 años que haya escatimado esfuerzos para adelantar acciones de mejoramiento de los procesos administrativos, algunos de ellos con resultados abiertamente opuestos que han sido la desazón de todos. En la pasada convocatoria y proceso para la designación del Rector, todos los candidatos tocaron el tema con suma preocupación, y creo que la Rectora que apenas inicia su gestión, quien ha batallado con el Instituto a su cargo por varios años y que también ha ocupado varios cargos administrativos, es consciente de ello y procurará avanzar en un sentido muy positivo sobre este asunto.

No está en las posibilidades de un aspirante a decano comprometerse en aliviar tantas cargas como la administración impone, pero sí considero que desde la Facultad hay muchos procesos que se pueden mejorar de varias maneras, para que sean más rápidos, menos traumáticos para el docente, más justos y equitativos y, sobre todo, más amables y llevaderos. También creo que no se deben aceptar calladamente las imposiciones administrativas que en muchas ocasiones se ordenan sin mayor reflexión; el decano puede y debe utilizar su vocería para argumentar ante los órganos de dirección de la Sede y nacionales, entre ellos el Consejo Académico, la inconveniencia de muchas disposiciones que dificultan la administración corriente y curricular.

COMPROMISO: En términos de una administración eficiente, supervisaré personalmente desde la oficina de la Decanatura y demás oficinas administrativas de la Facultad, la mejora sustantiva de los procesos administrativos que conduzcan al desarrollo más eficiente, efectivo y amable de la misión académica de la Facultad en cuanto a la docencia, la investigación y la extensión.

 

3. DESARROLLO DE LAS MULTIPLES FUNCIONES DE LA FACULTAD

 

De manera general un decano de facultad debe disponer de una gran concentración para el buen desarrollo de los múltiples procesos que se dan en ella, la mayoría de los cuales, si bien pasan por los Departamentos, la Secretaría Académica, por las Vicedecanaturas y por los órganos colegiados de gobierno, particularmente el Consejo de Facultad, son en últimas la responsabilidad del decano quien las autoriza o refrenda.

Los procesos a que hago referencia tienen que ver con situaciones tan corrientes como la expedición de resoluciones de todo tipo, situaciones administrativas de los profesores, eventos académicos, convocatorias, inversiones locativas y de equipos, grados de estudiantes, manejo de los Centros Agropecuarios y de la Estación Piedras Blancas, etc., hasta relaciones con los egresados para su mayor integración a la Facultad, con las empresas e instituciones públicas, con los ciudadanos y grupos de interés, entre otros, sin desconocer las conexiones administrativas internas con la Sede, la Rectoría y los órganos de dirección académica nacionales.

Resulta irreal negar que la mayor parte del tiempo de que dispone un decano está orientado a la atención de estás múltiples funciones, pero es menester reconocer que gracias a que ellas se desarrollan es que el funcionamiento de la Facultad se mantiene ordenada y al día. De alguna manera, se trata del “costo que hay que pagar” para que la Facultad funcione en lo cotidiano, de manera que hacerlo bien y de manera oportuna es lo que brinda la oportunidad para que pueda destinarse tiempo efectivo para adelantar los objetivos centrales programáticos de la administración en el período 2018-2020.

COMPROMISO: En relación con el funcionamiento corriente de la Facultad que le compete a la Decanatura, dispondré de la máxima concentración en ella para la oportuna atención de los procesos y el aprovechamiento de todas las oportunidades internas y externas que permitan acceder a recursos que favorezcan el desarrollo de los procesos que involucran a los profesores, los estudiantes, los empleados y los egresados.

 

4. SERVIR COMO UNA DIMENSIÓN SUPERIOR

 

La universidad es una institución singular entre todas las que se conforman en un estado de derecho. Tiene de suyo una misión que entraña profundamente la médula del desarrollo social y económico de la nación. Su impacto trasciende muchas generaciones, contribuye al bienestar ciudadano, a la conservación ambiental, a la generación de riqueza, a la paz y a la cultura. En este sentido, la Universidad es una fuente genuina y obligada de servicio esmerado a la Nación, a la que se debe irrestrictamente como quiera que son los ciudadanos quienes la constituyeron y la pagan con sus impuestos. Es imperativo no desconocer esto y reflexionar permanentemente en que todo lo que hacemos en docencia, en investigación y en extensión debe servir de manera cierta, y en un horizonte de tiempo también cierto, a los estudiantes, a sus familias y a la sociedad.

Servicio es una palabra y un propósito clave: se trata de la actitud consciente de que todas las acciones, pequeñas y grandes que se desarrollan en la cotidianidad del trabajo, o en los proyectos de mayor envergadura, deben estar encaminadas propositivamente al cumplimiento de un fin útil, de amplio beneficio para un conjunto de personas, bien sea ligadas a la propia Universidad o a una comunidad exterior a ella. Es también una actitud con sentido amable, que deja de lado el interés por el beneficio propio en aras de un beneficio colectivo.

Todo el talento humano ligado a la Facultad, empleados, profesores, estudiantes y egresados, debe motivarse para ser enrolado en una actitud permanente de servicio, de manera que no solo sean más llevaderas las tareas a veces pesadas del trabajo diario, sino que se propicie un clima favorable de convivencia que redunde en una mayor efectividad de las tareas misionales.

COMPROMISO: Procuraré permanentemente que desde la Decanatura y sus dependencias administrativas haya una permanente disponibilidad de servicio, para la pronta y amable resolución de los problemas, y para el desarrollo de los proyectos y propósitos que atiende el talento humano vinculado a la Facultad.

 

 

Original firmado por: Guillermo Vásquez Velásquez

Ingeniero Forestal, MSc. PhD.

Profesor Asociado - Facultad de Ciencias Agrarias

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  ASPIRANTE A LA DECANATURA DE LA FACULTAD DE CIENCIAS AGRARIAS UNIVERSIDAD NACIONAL DE COLOMBIA - SEDE MEDELLÍN 2018 - 2020

Eugenia González Castrillón.

Profesora Asociada

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Como aspirante a la decanatura de la Facultad de Ciencias Agrarias, presento este documento en el que se esbozan los lineamientos para el desarrollo de la Facultad en los próximos dos años, en sus fines misionales. Soy Profesora Asociada adscrita al Departamento de Ingeniería Agrícola y Alimentos, vinculada desde el año 1996, Ingeniera Agrícola de la Universidad Nacional de Colombia Sede Medellín (1992), Especialista en Gerencia del Medio Ambiente de la Universidad Pontificia Bolivariana (1996), Magister en Estudios Urbano-Regionales de la Universidad Nacional de Colombia Sede Medellín (2001) y Doctora en Territorio, Medio Ambiente y Sociedad de la Universidad Autónoma de Madrid, España (2009). Cuento con experiencia académico-administrativa que he adquirido en mi transcurrir a través de cargos en diferentes niveles en la Sede, así: Directora del Programa Curricular de Ingeniería Agrícola; Superintendente del Centro de Producción Agropecuario San Pablo de la Facultad; Directora del Instituto de Estudios Ambientales de la Sede; Directora de Bienestar Universitario de la Sede; y actualmente Directora del Departamento de Ingeniería Agrícola y Alimentos de la Facultad.

En mi desempeño académico en la universidad me he centrado en las construcciones rurales, específicamente en el tema de materiales no convencionales como es el caso de la Guadua,  el aprovechamiento de los subproductos del sector Agrario, la planificación y ordenación del territorio, y la conservación de los recursos naturales con énfasis en la gestión del agua.  Pertenezco al Grupo de Investigación de Ingeniería Agrícola clasificado en Colciencias como A1.

INTRODUCCIÓN

Según Cortés, las Facultades de Ciencias Agrarias tienen el desafío de formar profesionales con capacidades para hacer que los pequeños y los grandes productores del sector agrario alcancen oportunidades reales y efectivas de optimizar y tecnificar el campo, de ser eficientes y competentes, a la vez que puedan mejorar sus condiciones de vida (educación, salud, tierra, niveles de ingreso justos, entre otros). Desde dicha perspectiva el reto del educador es emprender la tarea de elaborar  planes y de trazar caminos a seguir.

La Facultad de Ciencia Agrarias de nuestra institución ha desarrollado sus procesos misionales buscando ser un referente de calidad para el sector agrario. A continuación se presentan algunos indicadores de los últimos años.

La movilidad nacional e internacional permite que nuestros docentes y estudiantes estén actualizados en los contenidos curriculares y proyectos del agro, generando una dinámica de actualización y mejoramiento continuo. Como se aprecia en la figura 1, la movilidad ha fluctuado año tras año, llegando en el 2016 a 58 movilidades docentes (de las cuales el 50% fueron internacionales), y 53 movilidades de estudiantes, notándose una disminución en la movilidad de ambos estamentos en relación con los años anteriores. Por ello desde la decanatura se promoverá de manera prioritaria el desarrollo de tan importante proceso de actualización y formación.

Figura1. Movilidad académica en la Facultad de Ciencia Agrarias

es docentes

Fuente: Informe de Gestión. Facultad de Ciencia Agrarias. Año fiscal 2016.

De otro lado la gestión de recursos para investigación y extensión sigue siendo indispensable para apalancar la misión institucional. El fortalecimiento de la relación Universidad‑Empresa‑Estado ha potenciado la realización de nuevos convenios y contratos, mejorando el nivel de ingresos (figura 2). De allí que deberá continuarse con esta tarea que le da visibilidad e integración con el sector productivo y la sociedad en general, apoyando y articulando los grupos de investigación que tienen presencia en la Facultad.

Figura 2. Ingresos por conceptos de investigación y extensión

fig 3

Fuente: Informe de Gestión. Facultad de Ciencia Agrarias. Año fiscal 2016.

En los proyectos de investigación y extensión buscaré una mayor participación de estudiantes de pregrado y posgrado, como un medio para la generación y transferencia de conocimientos. La dinámica de este aspecto en los últimos años se presenta en la figura 3.

Figura 3. Participación de estudiantes en proyectos de extensión e investigación

fig 4

Fuente: Informe de Gestión. Facultad de Ciencia Agrarias. Año fiscal 2016.

La Facultad cuenta con cuatro programas de pregrado profesional y uno de tecnología, uno de especialización, cuatro de maestría y tres de doctorado. Todos ellos serán apoyados desde mi decanatura para continuar con la cultura de la acreditación y re-acreditación de alta calidad en aras del mejoramiento continuo. La Facultad posee tres Estaciones Agrarias y una Estación Forestal mediante las cuales se facilita el desarrollo de prácticas académicas y de proyectos de investigación y extensión. Se destaca entonces la importancia de fortalecer la función administrativa con el objeto de gestionar y optimizar los recursos y establecer alianzas estratégicas. De esta forma proyectaremos y visibilizaremos la Facultad en la región y en el país.

Como directora que fui de Bienestar Universitario en la Sede Medellín, soy consciente de los problemas y la importancia de esta instancia para el logro de un buen desempeño académico y administrativo y de una sana convivencia en la universidad. Por ello, fortaleceré el programa de bienestar universitario a partir de un diagnóstico de las necesidades más sentidas de la comunidad de la facultad a este respecto.

Con base en lo anterior, presento los lineamientos de mi propuesta para la decanatura de la Facultad de Ciencias Agrarias en el periodo 2018-2020.

Lineamientos

 

 Articulación de la docencia, la investigación y la extensión:

  • Revisión permanente de los programas curriculares de pre y posgrado a través de planes de mejoramiento y acciones que busquen la integración de la investigación, extensión y docencia.
  • Se retomarán los resultados y las acciones definidas del Plan de Prospectiva realizado en el 2017.
  • La Unidad de Gestión de Proyectos de Investigación y Extensión creada en la Facultad en 2017 será puesta en marcha.
  • Se promoverán programas y proyectos de extensión para la capacitación de la mujer rural como protagonista del desarrollo productivo y social del campo.
  • La relación Universidad‑Empresa‑Estado será fortalecida desde la dirección de la Facultad, buscando soluciones a los problemas agrarios del país.
  • Buscar mayor participación de los docentes en las convocatorias de investigación a nivel nacional e internacional.


    Oportunidades académicas
  • Proponer un mecanismo de admisión especial para las carreras de la Facultad de Ciencias Agrarias, a fin de brindar mayores oportunidades a los jóvenes rurales para ingresar a la Universidad.
  • Desarrollar propuestas de educación continua acordes con las necesidades demandadas del medio y conforme a dinámicas propias del sector.
  • La especialización en “Sistemas de Información Geográfica y Desarrollo Rural” será objeto de implementación en la Facultad y de ofrecimiento en otras sedes de la universidad.
  • Promover e incentivar a los estudiantes y profesores de la Facultad en el aprendizaje y fortalecimiento del inglés como segunda lengua. Igualmente la formación en programas académicos pertinentes (maestría y doctorado).


    Infraestructura
  • Potenciar la estación Agraria San Pablo como un espacio para el desarrollo de eventos académicos de carácter nacional e internacional.
  • Gestión de recursos para hacer mantenimiento, mejorar y ampliar la infraestructura en galpones, aprisco, porcícola y laboratorios e instalación de luminarias en el parque de maquinaria de Cotové.
  • Construcción de la porcícola en Paysandú y el Aula Ambiental en Piedras Blancas.
  • Reingeniería del bloque 14.
  • Mejoramiento de la dotación (equipos e instrumentación) de los laboratorios.


    Internacionalización.
  • Mejorar los indicadores de movilidad nacional e internacional en términos del número de docentes y estudiantes.
  • Propiciar la admisión, mediante la más amplia difusión de los programas de posgrado de la Facultad, buscando un mayor ingreso de estudiantes extranjeros.


    Comunicación.
  • Fortalecer los medios de comunicación virtuales para visibilizar la facultad a nivel regional, nacional e internacional.
  • Realizar acciones que permitan la reclasificación de la revista de la Facultad ante Colciencias.


    Desarrollo rural y post-acuerdo
  • La Facultad debe participar con sus programas de investigación, extensión y formación, al servicio del desarrollo rural y en particular al proceso de construcción paz. Dicha participación puede desarrollarse a partir del programa de tecnología forestal, entre otros, por el gran impacto que puede tener en las zonas consideradas en el Acuerdo de Paz.
  • Nuevas alianzas para desarrollar cohortes en otras regiones o regiones asociadas al posconflicto. Regionalización de programas de posgrado.


    Bienestar universitario.
  • Ampliar la cobertura del bono alimentario promoviendo la participación de los egresados, cooperativas del sector y empresas.
  • Diseñar sistemas de apoyo mediante becas gestionadas con el sector empresarial y productivo y egresados.


    Egresados.
  • Vinculación permanente con los egresados, mediante la programación de eventos como cursos de actualización, conferencias, efemérides, actos culturales, etc.
  • Crear la “Catedra del Egresado” donde ellos sean gestores, participantes y dinamizadores de este espacio académico. La cátedra será dirigida tanto a estudiantes como egresados y buscaría compartir experiencias de vida y del ejercicio profesional.
  • Actualización permanente de la base de datos de los egresados de la facultad e implementación de estrategias de comunicación.

Finalmente, me permito invitar a: estudiantes, docentes, egresados y administrativos de la Facultad a que apoyen mi aspiración a la decanatura de la Facultad de Ciencias Agrarias y a desarrollar conjuntamente los lineamientos propuestos.

 

 

Firmado por: EUGENIA GONZÁLEZ CASTRILLÓN

Profesor Asociado

Departamento de Ingeniería Agrícola y de Alimentos

 

La Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Colombia sede Medellín como motor del desarrollo rural en una Colombia en paz

Por Omar Camargo

“El conflicto armado colombiano ha sido en gran medida rural.

De ahí la importancia de las políticas para el campo en la construcción de la paz”.

José Antonio Ocampo

Jefe de la Misión para la Transformación del Campo (Misión Rural)

 

21 PREMISAS GENERALES:

1.        La paz comienza por casa.

2.      La primera innovación y la más importante por hacer, es sobre nosotros mismos.

3.      La dueña de la Universidad es la sociedad y es a ella a quien se debe responder.  

4.      La Facultad es el campo y el campo es la Facultad.   

5.      El campo es el escenario central para el desarrollo económico y social en el posconflicto.   

6.      Como Facultad, la diversidad es nuestra mayor fortaleza y el individualismo, nuestra mayor debilidad.
      

7.      Los problemas agrarios, desbordan el ámbito de las ciencias agrarias.

8.      Big Science se hace con Big Teams, Big Data… La construcción del conocimiento es un proceso colaborativo multidisciplinar. Los investigadores solitarios son cosa del pasado. 

9.      Frente a los enormes retos por encarar, somos una Facultad pequeña en cantidad, aunque inmensa en calidad.  

10.  Docencia, investigación y extensión no son excluyentes, son complementarios.

11.  De nuestros Egresados depende nuestro puesto en la sociedad. 

12.  El impacto de nuestra producción académica determina nuestra calidad científica.

13.  La actividad investigativa debe comenzar muy temprano desde el pregrado.   

14.  Las Estaciones Agrarias y la Estación Forestal son centros de prácticas, referentes productivos en innovación, desarrollo tecnológico y manejo ambiental.

15.  Aunque a las instituciones las hacen las personas, las personas no están por encima de las instituciones. 

16.  El personal administrativo, técnico y de servicios están para facilitar la labor docente.

17.  Para un buen ambiente laboral la Inteligencia Emocional ayuda, y bastante.     

18.  El Bienestar es para todos, en todo momento, en todo lugar.   

19.  El liderazgo nos fue dado, nuestra responsabilidad es mantenerlo y, en lo posible, ampliarlo, multiplicarlo.

20.  Una organización líder, produce líderes.

21.  El propósito final es que lleguemos más lejos de lo que lo haríamos individualmente.

 

3 IDEAS RECTORAS:   

 

  • Conectar con el Desarrollo Rural:

A lo largo del articulado de la nueva Ley 1876 aprobada el pasado 29 de diciembre de 2017, por medio de la cual se crea el Sistema Nacional de Innovación Agropecuaria y se dictan otras disposiciones, se redefine un nuevo marco institucional en materia de política de Estado para el sector agropecuario, agroindustrial y forestal, se rediseña y determina la forma en que intervendrán y se articularán los diferentes actores involucrados; la forma en que se hará investigación, extensión y formación/capacitación; la forma como se planearán y se priorizarán las inversiones. En resumen, la forma en que concebimos el campo, lo agrario, la ruralidad en Colombia va a cambiar, y radicalmente. Es nuestra tarea, por lo tanto, reconectarnos con esa nueva institucionalidad a la vez que concentrar los esfuerzos en interactuar con, y acceder a, los recursos de Colciencias, el Ministerio de Agricultura, el Fondo de Ciencia Tecnología e Innovación del Sistema General de Regalías y otras fuentes del orden regional, nacional e internacional.    

 

 

  • Anticipar el Futuro:

El principal objetivo de este componente es tratar de vislumbrar los futuros escenarios a los que se verán enfrentados docentes, estudiantes y egresados, principalmente de pregrado, de una Facultad de Ciencias Agrarias, en el corto y el mediano plazo (2030), como consecuencia de las demandas de los consumidores, los tratados comerciales, políticas agroalimentarias, la intensificación/ industrialización de las producciones y, sobre todo, del cambio tecnológico, la robotización, la internet de las cosas (animales y plantas), big data y la inteligencia artificial que de manera rápida, amplia y profunda está fusionando los mundos físico, digital y biológico afectando de manera directa e irreversible virtualmente todo en nuestras vidas, incluida la naturaleza del trabajo, lo cual nos obliga a, en lo posible, tratar de anticiparlos, so pena de desaparecer. Para ello se requiere que ejercitemos nuestra capacidad de prospectiva, de flexibilidad, de reinvención estratégica, de aprovechamiento a fondo nuestras ideas y capacidades como equipo. De crear nuevos valores, de apuntar a nuevos horizontes.  La idea es organizar por lo menos un evento colectivo (“Ciencias Agrarias”), en 2019, que convoque a las autoridades nacionales e internacionales más doctas en el tema, al final del cual podamos contar con una hoja de ruta a seguir.   

 

 

   

  • Primero la Academia.

Nuestra principal tarea es formar personas integrales a través de la docencia. El futuro de la Facultad/Universidad depende de lo que hagamos en lo académico. El rol del docente tradicional, por su parte, debe evolucionar. “Ante el crecimiento y consolidación de las nuevas tecnologías, de la información, hemos venido decantando el nuevo rol del docente como catalizador, retador, organizador colaborativo del trabajo de pares, gestor de proyectos de gran impacto social y económico, promotor de autonomía de los jóvenes en formación” (Relatos con visión 2030: Universidad Nacional de Colombia Innovadora. C. A. Garzón, Vicerrector General U.N. Claves para el Debate Público. Bogotá, 2018, No. 68. p.7). Sumado a esto, la rápida obsolescencia de la información obliga a la actualización permanente por parte del docente y al replanteamiento de lo que se hace y se enseña en clase a los profesionales (del futuro). “Debemos superar las rigideces de los saberes, disciplinas y profesiones para abrir paso a las competencias múltiples, flexibles y asociativas demandadas hoy” (Relatos con visión 2030: Universidad Nacional de Colombia Innovadora. V. M. Moncayo, Ex-Rector U.N. Claves para el Debate Público. Bogotá, 2018, No. 68. p.50). En ese sentido, la virtualidad y el uso intensivo de tecnologías deberá entrar a hacer parte complementaria importante de la formación en pregrado (PEAMAS, con mayor intensidad), y en posgrado (especializaciones, principalmente). La meta es que todos los profesores de la Facultad, para empezar, a mediados de 2019, esté utilizando una herramienta para gestión del aprendizaje, como Moodle, por ejemplo. Se dará prioridad a la atención, estudio y análisis de los asuntos académicos, a sus políticas, su financiación y su mejoramiento continuo. Se seguirá insistiendo en la evaluación de la Reforma Académica. Se revisará la pertinencia de los perfiles profesionales con las demandas y características el mercado laboral actual y futuro.

El Consejo de Facultad es y seguirá siendo corazón y cerebro académico de la Universidad. 

La invitación, en resumen, es avanzar en el uso de las Tecnologías de la Información y la Comunicación entendidas como las herramientas que nos facilitarán la interacción con los estudiantes, con nuestros pares y, en general, con el mundo.         

 

 

    1 ACCIÓN APREMIANTE:  

Los posgrados de la Facultad de Ciencias Agrarias serán objeto de una reingeniería para efectos de reorganizar sus dinámicas, balancear sus finanzas, articularlos de manera productiva con las instituciones/empresas/Estado y redimensionar su alcance y su impacto social y científico, todo con el fin de asegurar su futuro y su calidad.         

 

 

  1 COMPROMISO ESPECIAL:  

Las Estaciones Agrarias y la Estación Forestal serán objeto de una atención y seguimiento especial y permanente con varios objetivos de mejorar: i) la conectividad física y virtual, ii) la logística investigativa, iii) el bienestar (para trabajadores y visitantes), iv) la agilidad en los procesos administrativos, v) la rentabilidad académica, ambiental y financiera, vi) modernizar la infraestructura en lo que tiene que ver, principalmente con acequias, redes de servicios básicos (agua, electricidad), caminos y linderos. Y alojamientos en la Estación Forestal.   

     

COMPROMISOS PERMANENTES:

A NIVEL DE FACULTAD:

  • Modernización de la Facultad en fondo y forma.
  • Gestión para la consecución de recursos para investigación, laboratorios y apoyo a posgrados.
  • Recuperar el programa de becas. No cargar los costos de los becarios a los posgrados.
  • Promover la internacionalización (convenios, pasantías, visitas, intercambios).
  • Respaldo a la visibilidad internacional (ponencias, pasantías).
  • Promover los posgrados, sobre todo los nuevos (Especializaciones).
  • Fortalecimiento de la investigación/extensión en pregrado. Semilleros.
  • Promover los PEAMAS.
  • Mantener la RNFA en sus más latos estándares y promover la actividad editorial.
  • Diversificar, multiplicar y fortalecer los vínculos con los egresados y pensionados.
  • Mantener y fortalecer el programa “Tiquetera Estudiantil”.
  • Revisar el examen de admisión y su relación con la deserción.
  • Acompañamiento académico y de bienestar para prevenir la deserción prematura.
  • Facilitar la gestión administrativa.

A NIVEL DE SEDE Y A NIVEL CENTRAL:

  • Participar activa y productivamente en los debates que seguramente se darán sobre las reformas a la Ley 30/1992, el Decreto 1279/2002, la Ley 1530/2012, el Sistema Nacional de Educación Terciaria e implementación del proceso de paz (punto1), entre otros y que afectarán lo que tiene que ver, principalmente, con financiación, autonomía, cobertura, calidad, gobierno universitario, desarrollo rural y mercado laboral, entre otros.      

 COMPROMISO ÉTICO:

Esta propuesta suscribe a partir del entendimiento y de manera abierta, libre y proactiva el COMPROMISO ÉTICO construido por la comunidad universitaria y el cual se traduce en el ejercicio permanente de los valores institucionales de diálogo, responsabilidad, equidad, respeto, honestidad, pertenencia y solidaridad.

 

 

Firmado por:DELMIS OMAR CAMARGO RODRÍGUEZ

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"Los resultados se obtienen de explotar las oportunidades,

no de resolver los problemas"

(Peter Drucker)